La Saigneuse

La Sangrada
Je vous raconte la vie d’un bourgeois
qui se vanta d’un chose trés folle:
Qu’une femme ne pourrait le tromper
Sa femme en entendit parler.
Elle en délibéra en elle-même
et prêta un serment:
elle fera de lui un menteur
quelques précautions qu’íl prenne!
Un jour,
La noble dame et le prud’homme étaient dans leur maison.
Ils étaient assis sur un banc l’un à côté de l’autre.
Ils n’y étaient pas restés longtemps.
Que voici un bon à rien à la porte.
Il était très élégant et courtois et il ressemblait
deux fois plus á un femme qu’a un homme:
vêtu d’une chemise fine,
D’un guimpe bien teinte au safran
Il arriva en faisant un grand tumulte:
Il porte des ventouses pour tirer le sang!
Les cuento la vida de un burgués
que se jactaba de una cosa muy loca:
Que una mujer no podría engañarlo
Su esposa escuchó hablar de ello.
Deliberó para sí misma sobre esto.
E hizo un juramento:
Haría de él un mentiroso
Sin importar las precauciones que él tomase!
Un día,
la noble dama y el buen hombre estaban en su casa.
Estaban sentados en un banco uno al lado del otro.
No habían estado allí por mucho tiempo.
cuando un bueno para nada llegó a la puerta.
Era muy elegante y cortés y parecía
dos veces más a una mujer que a un hombre:
Vestía una camisa fina,
con un velo bien teñido con azafrán
llegó haciendo un gran alboroto:
¡Llevaba ventosas para sacar sangre!